La responsabilidad es un derecho. Sí, un derecho. Usted tiene derecho a ser responsable.
No es un deber, porque aunque intenten enseñartelo en tu casa, en tu colegio, en tus primeros pasos, hay gente que sencillamente no lo aprende… nunca. Entonces, digamos que si la gente tiene el poder de tomar decisiones en una acción, lo llamaremos derecho.
Entonces, habiendo aclarado este punto, me gustaría inmiscuirme en el hecho que a la gente le agrada ser irresponsable; la gente tiene que disfrutar ser irresponsable, y no sé si es un problema de cultura, de dejarlo pasar, de olvidarnos que hay un punto en nuestra conciencia que nos hace decidir si hacemos las cosas que técnicamente debemos cumplir o no.
Qué quiero decir con esto?
Que desde que somos pequeños, nuestros padres tratan de ser lo más flexible con nosotros y tratan de justificar nuestras faltas de cualquier manera… en mi generación, el perro se comía la tarea, se te perdía el libro, llegabas tarde porque había mucha cola y faltaste a la clase de la mañana en la universidad porque te quedaste dormido o se te espichó un caucho, había retraso en el metro… pero siempre tus profesores y tus padres trataban de darte otra oportunidad… «Mañana me entregas la tarea», «Bueno, mañana trata de llegar más temprano» «Pobre perro, está bien?» POR QUÉ?POR QUÉ? No se dan cuenta del mal que le hacen a la sociedad: un país lleno de irresponsables.
Cuando fuiste creciendo, asumiendo que pasaste por todas esas pequeñas mentiras con las que sobriviviste cada día, llegamos a un punto en el cual todos jugamos a ser adultos: el trabajo.
El trabajo y la responsabilidad, para algunos es un juego armónico que se desarrolla sin mayores complicaciones: llegas a la hora, almuerzas el tiempo debido, cumples con tus metas diarias, mensuales y anuales, te quedas el tiempo necesario y así sucede la mayoría del tiempo; estas personas deciden ser responsables.
Pero, cuál es la contraparte? Cuáles son las consecuencias de esa «segunda oportunidad»?:
El trabajo y la responsabilidad, no entran en la misma oración porque el día comienza así: te quedaste dormido, no te bañaste, se te olvidó peinarte, te pusiste lo primero que encontraste sin importar si lo escogiste del cesto de la ropa sucia, llegas tarde al trabajo, medio haces lo que tienes que hacer y esperas la hora del almuerzo en el cual te tardas 3 horas, no cumples con las metas diarias, ni mensuales ni anuales y si alguien más depende de tí, atrasas el trabajo de ellos, no entregas tus informes/reportes/trabajos a tiempo, te tomas un café en la tarde para que se te pase más rápido la hora del burro, juegas con el celular y montas los pies en el escritorio con los zapatos que no debías llevar porque son solamente para los viernes, no pagas tus impuestos………….
y el día de mañana… Le enseñas a tus hijos lo mismo que eres tú. Child see, child do.
Imagina si es el doctor el que llega tarde, si tu llegas a la hora pautada para una reunión y los demás no, si es el de la panadería que se queda dormido, si es un concurso que te ganas y no te dan el premio, si es un vuelo que se atrasa y nadie responde, si es un servicio que te ofrecen y no te cumplen.
La irresponsabilidad es la negación al desarrollo como personas, como ser humano; es la que justifica cualquier despropósito, cualquier incumplimiento, porque las razones no son que había cola o que te quedaste dormido, la verdadera razón, es que eres irresponsable.
Confiamos en aquellos que son responsables… y no en los demás.
Tú que decides?
-♥-
Sígueme:
Muy cierto todo esto…
Gracias por leer y por compartir!!!
Wow….nunca espere encontrarme con un articulo como este a las 3:00 am, pero cuando comencé a leerlo no pude parar de leerlo. Siendo Venezolano y con 26 años viviendo en Venezuela, pasar mis ojos por cada una de estas oraciones es vivir un flashback de toda mi vida en un abrir y cerrar de ojos: me han tocado en lo más profundo del corazón.
En Venezuela muchas veces me siento viviendo en una ilusión. Nada es lo que parece, nada es lo que debería ser…y entre el temor y la frustración termino a veces resignandome y aceptando todo aquello que está claramente mal.
¿Como no justificar lo malo? planeas una reunión, la gente no llega a la hora indicada; vas al supermercado de la esquina y no encuentras los productos, la gente te trata mal, colas…..; quieres salir al cine y no puedes porque no tienes como regresar a tu casa a las 8:00 de la noche por la inseguridad….; y así puedo enumerar una enorme cantidad de cosas. Al final terminas gastando tanta energía que llegar tarde ya ni te preocupa….sinceramente a veces pienso que ni tiene importancia…. te quedaste dormido? para que preocuparte? si sabes que igual la pasaras mal y te vas a amargar el día tratando de llegar temprano y de todas maneras la gente en tu trabajo no valora eso…..compras piratería y sabes que esta mal… pero aun lo haces … porque sabes que de otra manera conseguir «la música que te gusta» o ver » las películas que te gustan» es imposible o es simplemente muy caro….
Y así vas poco a poco perdiendo tu integridad humana. Haciendo concesiones morales para poder sobrevivir a la cárcel llamada Venezuela.
No estoy diciendo que hacer cosas malas es bueno, solo digo que hacer lo correcto en una sociedad como la venezolana a veces cuesta mucho. Ser responsable en una sociedad de irresponsables es cuesta arriba.
Yo quiero ser un emprendedor, alguien capaz de crear cosas nuevas e innovadoras. Y me encantaría trabajar en el desarrollo de nuevas tecnologías porque a mi parecer, la tecnología es la que nos permite avanzar como seres humanos a un futuro mejor.
Pero ahora estoy seguro que si sigo repitiendo patrones de conducta venezolanas no voy a poder cumplir mis metas.
… soy un irresponsable. Detesto serlo y no seguiré justificándolo
Ya desde hace tiempo que he querido salir de esta cárcel (digo país)…..es hora de cambiar.
Muchas gracias por tus palabras.
No tienes idea de las veces que he enviado este link a compañeros, por correo, por chat y por Facebook. Demasiado acertado este artículo mi estimada.. 😉
Gracias Álvaro, muchas gracias por compartirlo. Un gran saludo desde el sur.
Pues su saludo no va a recorrer mucho estimada, pues estoy en Santiago. 🙂
Ahhh bueno, pero sígame en mi página de Facebook, me llamo Lelo Quevedo también 🙂 jaja saludos!