#MemoriasDeUnaBlogger Capítulo 6: Yo te amo

Nacimos rodeados de sentimientos.

Comenzamos a crecer, a conocernos, a compararnos, a luchar por ser aceptados en un círculo (y fuera de él). Comenzamos a competir con otros, a sentirnos mejores, superiores. Esperamos que con esas cualidades, por esa superioridad que sentimos, el creernos mejor que los demás, debemos ser amados. Y empezamos a buscar el amor porque nos creemos mejores que el resto…

Y buscamos un amor mejor que el del resto, sin errores, un amor desenfrenado pero con reglas. Buscamos un amor superior, buscamos un amor egoísta, un amor externo, que se manifieste con flores y ramos, buscamos que se demuestre, que sea público, que sea externo, que todos lo sepan. Nos cansamos de buscarlo y probamos. Probamos distintas personas que nos ofrezcan ese amor. Nos acostumbramos a buscarlo y a volvemos a compararnos.

Y de tanto compararnos se nos va la vida, nos hacemos cada vez mayores, nos creemos cada vez más superiores, con más exigencias, con más perfección… Y nos encontramos con las veces que fallamos buscando el amor. Seguro han sido muchas. ¿Verdad?

Resulta que el amor no estaba ahí donde lo buscaste siempre, el amor no era una canción ni un poema, no era una foto o una frase copiada, ni una salida obligada, ni un mensaje antes de dormir, no era una aplicación de amor a primera vista. El amor lo has tenido cerca, has perdido el tiempo buscando afuera, cuando el amor, el verdadero y más profundo amor, comienza por la persona más importante para ti: Tú.

El amor es despertar cada mañana mirándote al espejo. El amor es tomar tus propias decisiones, es ser capaz de aceptar el cuerpo cambiante que tienes, es mimarte y consentirte. El amor está en no llenarte de comparaciones, en saber que eres único, que tienes tu estilo, que eres invencible ante los cambios, el amor es aceptar tus debilidades. El amor es conocerte, es encontrarte con tus pensamientos, es revisar tu interior. El amor es conocer tu misión en la vida y luchar por construirte ese mundo. El amor es saber compartir todo eso que llevas dentro.

A pesar de lo efímera de la vida, del mundo cambiante, de las personas que pasan por tu mundo, quién realmente queda al final de la historia eres tú. Y solo eres capaz de amar a otros, cuando seas capaz de amarte a ti mismo.

Hoy, quiero que te mires y seas capaz de gritar a los cuatro vientos:

Yo te conozco, yo te acepto, yo te entiendo, yo te respeto…

Yo te amo!

(Feliz San Valentín)

-♥-

Sígueme:

logo-facebookFacebook: Lelo Quevedo
instagram
Instagram: @leloquevedo

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s